Aquí tenemos un precioso gramófono con mucho carácter. En este modelo, los distintos elementos se integran en un mueble de madera con tapa en la parte superior y puertas en el frente. Al levantar la tapa se descubre un plato giratorio, sobre el que se coloca un disco previamente grabado, y un brazo que termina en una aguja reproductora que va recorriendo los surcos impresos en el disco. En el receptáculo que se abre por medio de las puertas pequeñas se oculta la bocina. La apertura de las puertas permite elevar el volumen del sonido. En el receptáculo más grande se encuentra el motor al que se da cuerda con ayuda de una manivela. En las puertas inferiores tiene unos compartimentos útiles para guardar los discos y en la parte trasera, posee otras dos puertas dando lugar a otro departamento útil como bar, donde acomodar unas botellas. Utiliza discos de baquelita.
Este blog pretende ser un lugar de encuentro de todos los amantes de las manualidades, de la pintura, la artesanía y cualquier arte en el que pongamos nuestro corazón. Irene
viernes, 17 de mayo de 2024
El sonido de "La voz de su amo"
martes, 2 de marzo de 2021
Máquinas de coser
El antes y después
Os cuento una breve reseña sobre este invento:
viernes, 29 de enero de 2021
Baúles para el recuerdo
lunes, 11 de enero de 2021
Un mueble con posibilidades
Hoy os muestro la recuperación de un mueble con estructura de castaño y, aunque el resto es de chapa, no por ello deja de tener posibilidades.
La chapa estaba bastante deteriorada y con mucha carcoma, pero el resto estaba en buenas condiciones.
Decidí dejarle las puertas, porque podía trabajarlas por el interior sin problema y, además, estaban en buen estado. Entonces lo primero que hice fue quitar lo deteriorado y darle un buen lavado.
Una vez bien seco, le di un tratamiento preventivo para la carcoma, impregnando bien toda la madera.
Mientras se secaba, preparé los laterales nuevos, la trasera y las baldas pintándolos con pintura acrílica de un verde agua muy suave con dos manos de pintura, lijando entre mano y mano.
Di dos manos de barniz acrílico incoloro a la estructura y le puse al interior de las puertas un papel pintado rematándolo con pasamanería.
A continuación ya pude cerrar el mueble colocando todas todas las chapas nuevas.
El frente de las puertas lo pinté también con dos manos de acrílico terminándolo con un estarcido.
sábado, 16 de julio de 2011
Nuevos horizontes
sábado, 26 de marzo de 2011
Antiguas pertenencias
sábado, 19 de febrero de 2011
Cambio de look
Empezamos por quitar el antiguo tapizado y sacar todas las tachuelas. A continuación decapamos la madera con un gel decapante y lijamos la pieza. En este caso se conservó la estructura del asiento, ya que era de muelles y estaba en buen estado. Una vez limpia la madera, damos un tratamiento anticarcoma.
Teñimos las sillas con un tinte al agua y las protegemos con una laca tapaporos. Una vez seca, le pasamos una lana de acero, quitamos el polvillo con un paño y le damos una laca de acabado.
Ahora ya podemos tapizar. Buscamos una tela apropiada, y cortamos las partes que necesitamos dejando un margen para doblar. Fijamos con grapas en cuatro puntos, detrás y delante, derecha e izquierda. A partir de ahí, vamos poniendo grapas en ambos lados, simultáneamente, hasta completar el asiento. Cuidamos las esquinas y la base del respaldo, que es donde requiere más atención. Cuando hayamos terminado, colocamos una cinta de pasamanería para terminar el trabajo.